Mensajes de diversas orígenes
domingo, 5 de febrero de 2023
¡Levantad la cabeza, hijos míos! ¡Despertad de vuestro sueño!
Un Mensaje de Nuestra Santísima Madre Dado a la Amada Shelley Anna el 5 de febrero de 2023

Nuestra Santísima Madre,
Adornada de luz radiante dice.
Mis Amados Hijos
Preparad vuestros corazones,con las Bendiciones de Gracia,y Misericordia,que brotan de los Sagrados Corazones,de Mi Hijo y de Mí.
Hijos Míos
Las tinieblas han ensombrecido a la humanidad.
El pecado y el orgullo han dominado sus corazones.
Mis Amados Hijos
Debéis recoger vuestras armas espirituales, y rezar Mi Rosario de Luz . Unid vuestras oraciones a las mías, para que el camino de la justicia, que Mi Hijo ha trazado ante vosotros, sea iluminado para todos. Rezad, hijos Míos, rezad sin cesar.
Hijos Míos
El Cielo y la Tierra tiemblan de expectación, ¡por el regreso de Mi Hijo!
La señal de Mi Hijo pronto se mostrará para que todos la vean. ¡Levantad la vista, hijos míos! ¡Despertad de vuestro sueño!
Os cubro con Mi manto, mientras os refugiáis en el Sagrado Corazón de Mi Hijo.
Donde una cubierta de protección, os cobijará de los escombros ardientes ,que pronto iluminarán los cielos sobre vosotros.
Las guerras y los rumores de guerras continúan, mientras el mundo entra ahora en una tercera guerra mundial.
No temáis, pues estas cosas deben suceder.
¡Los Sagrados Corazones de Mi Hijo y Yo triunfamos!
¡El mal no prevalecerá!
Hijos Míos,
Recordad siempre Mis Promesas, y que vuestras oraciones sean incesantes.
Así dice, Vuestra Madre Amantísima.
Escrituras de Conformación
San Mateo 24:6
"Y oiréis hablar de guerras y rumores de guerras. Mirad que no os turbéis. Porque es necesario que sucedan estas cosas, pero aún no es el fin».
San Mateo 24:12
«Y por haber abundado la iniquidad, la caridad de muchos se enfriará».
San Mateo 24:30
«Entonces aparecerá la señal del Hijo del hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del hombre que vendrá en las nubes del cielo con gran poder y majestad.»
Salmo 103:2-5
Alaba, alma mía, al Señor, y no olvides todos sus beneficios; que perdona todos tus pecados; que cura todas tus enfermedades; que redime tu vida de la destrucción; que te corona de bondad amorosa y de entrañables misericordias; que sacia de bienes tu deseo, para que tu juventud se renueve como la del águila.
Isaías 26:4
Confía en el Señor para siempre; porque en el Señor, el Señor, hay una Roca eterna.
Apocalipsis 22:12
¡He aquí que vengo pronto! Mi recompensa está conmigo, para pagar a cada uno según su trabajo.
Marcos 14:38
Velad y orad, para que no entréis en tentación. El espíritu, en efecto, está dispuesto, pero la carne es débil.
Mateo 2:10-11
Cuando vieron la estrella, se alegraron muchísimo. Entraron en la casa y vieron al niño con María, su madre, y postrándose, le adoraron. Abriendo sus tesoros, le ofrecieron regalos: oro, incienso y mirra.
Salmo 91:1
El que habita en el lugar secreto del Altísimo descansará a la sombra del Todopoderoso.
Romanos 13:11
Haced esto, conociendo el tiempo, que ya es hora de que despertéis del sueño; porque ahora la salvación está más cerca de nosotros que cuando creímos.
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